lunes, 14 de agosto de 2006

Rompo una lanza en favor del servicio de autobuses de Phoenix

1) LAS RUTAS

Las rutas del servicio de autobuses de toda la zona de Phoenix son facilísimas, tanto como el trazado de las calles: la mayoría de las rutas van o de norte a sur y viceversa, o de este a oeste y viceversa. El inconveniente de este método es que si quieres desplazarte en diagonal de un punto a otro del mapa, lo más probable es que tengas que coger dos autobuses.

Otro aspecto positivo de las rutas de autobús es que la mayoría de ellas son lo suficientemente largas como para recorrer varias de las ciudades de los alrededores de Phoenix: en nuestra zona por ejemplo están Tempe, Mesa, Scottsdale, Chandler, etc.

2) EL SISTEMA

El sistema es sencillo: Existe una guía estupenda, que es un libraco gordísimo y que regalan en los autobuses, que llama BUS BOOK. En él aparecen absolutamente todos los horarios y rutas de los autobuses y también en él indican donde se pueden comprar los billetes, cuánto cuestan, etc… ¡Y todo ello en inglés y en español! (Aunque, siento decirlo, el español a veces deje un poco que desear).

Los billetes sencillos cuestan 1,25 dólares, pero cuando te montas en el autobús, el conductor te da un papelito amarillo en el que figura la hora hasta la que puedes utilizarlo para seguir montando en otros autobuses (suelen ser dos horas y es bastante útil).

3) LOS CONDUCTORES

Los autobuseros arizónicos son una raza bastante particular. Por lo general, son todos unos personajillos: bastante enrollaos, hasta el punto de que algunos ¡¡¡te meten unos rollos!!! Durante nuestros primeros días nos encontramos por lo menos con uno que quiso aprender español con nosotros de manera espontánea y un negrata (de estos incomprensibles por el acento) que por lo visto había estado en España, y le encantaba, y nos contó toda su aventura española (no entendimos ni jota, la verdad). Además, son gente muy servicial (si les pides que te paren entre paradas, casi seguro que lo hacen; o si necesitas que te avisen cuándo bajarte)… ¡¡Dignos de conocerlos!!

4) LOS PROPIOS AUTOBUSES

En general, no son autobuses de última generación… Con deciros que para avisar de que te vas a bajar hay que tirar de un cordón (o “jalar de la cuerda”, como reza el cartel en español)… Parece ser que el año pasado eran aún más antiguos, porque por lo visto han renovado la flota este año; pero tienen dos características principales que los hacen utilísimos: una es que TODOS están completamente adaptados para minusválidos en silla de ruedas o en triciclo a motor (¡¡¡Aprended en España!!! Eso se consigue con cuatro duros, no hace falta más) y la segunda es que TODOS tienen un portabicicletas en la parte delantera en la que caben dos o tres bicicletas; lo cual los hace doblemente útiles.

(Fotos: 1) www.tempe.gov 13/08/2006, 2) y 3) cosecha propia y 4) www.asuwebdevil.com 13/08/2006)


4 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola,

me sorprende que una ciudad como Phoenix tenga un servicio de autobuses eficiente, sobre todo porque montar un sistema de transporte publico en un area tan vasto es dificil de narices, asi que bravo por los arizonianos! Respecto a los autobuseros, un dato importante, no es que los autobuseros sean asi de simpaticos, es que (nos guste o no) los yankees son asi en lineas generales. A mi me ha pasado ya varias veces que estando despistado alguien se ofrezca voluntariamente a ayudarme. La verdad es que en esos aspectos son muy amables. De hecho suelen ser confiados y tienen buena voluntad (otra cosa es que se crean que son el pueblo elegido y que les gusten las armas casi tanto como el sexo...)

Saludos.
Cesar a punto de irse a casa.

juliacgs dijo...

Jopé, César, a lo que me refería es que algunos autobuseros son particularmente así (sólo algunos, otros son más bordes que cardos borriqueros); en comparación por ejemplo, con sus colegas madrileños, que, en general, no se puede decir que sean los seres más amables del universo, la verdad... (Más bien todo lo contrario). Además, no es sólo que sean amables o serviciales, es que esos algunos te tratan como si fueras de su familia na más entrar en el bus.

Sobre el tema "americanos-simpatía" tendré que hablar más adelante porque, como en muchas otras cosas, se promocionan mu bien, los jodíos, y a veces nos convencen de unas cosas... Así que habría que matizar...

No entiendo lo de las armas y el sexo... De hecho unas las exhíben como símbolo de identidad y el otro lo esconden y censuran como si no existiera...

¡Tú convéncete de lo que quieras, César! Pero Suecia o Noruega hubieran sido mejor elección.

eulez dijo...

No es que los autobuseros sean los tipicos yankis que te ponen buena cara y te saludan de forma afable. Es que son unos tios muuuy extravagantes (mas de lo normal). En cuanto a la supergeneralizacion de Cesar estilo soyelexpertomundialenespintresmedios, pues no es cierta del todo. Ana, la chica argentina con la que trabajo aqui dice que "estos anglosajones" no saludan ni nada cuando se les dice "Hi" o "Moooorning" (digase muuuy nasal). Vamos, que para ella son un poco bordes. Y lleva viviendo aqui bastantes anhos.

Que esto es como lo de la eficiencia alemana... habria que matizar bastante...

Un saludo.

Pablo

PS: Cesar, que hay de tu postdoc por los EEUU? Se sabe si te lo han dado ya? Yo me habria ido a Dinamarca...

Ruth dijo...

No sé muy bien cómo está el tráfico por allí, por aquí desde luego a veces se entiende que los autobuseros sean como son. Yo no podría ni conducir media hora por esta ciudad.
Con respecto a las bondades del transporte público en Phoenix me sorprende y me alegra, sobre todo por vosotros, ¿quien hubiera dicho que algo público allí iba a funcionar bien?
Con respecto a experiencias "autobusiles" a mí también me sorprendieron mucho en Oxford, con lo estirados que son los ingleses y los autobuseros te saludaban al subir y al bajar y también si te descuidabas te pegaban unas chapas que entendías a medias. Supongo que allí influía que es una ciudad de estudiantes y que es pequeña, con poco tráfico, eso baja bastante el humbral de "malaleche" del personal.
Saludos