
Cuando acabé, aproximadamente el 23 de agosto, uno de los macro-trabajos en los que estaba empantanada, nos fuimos una tarde de excursión por la zona del Arizona Mills Mall en busca del Fry's Electronics, que es la rama especializada del Fry's (el supermercado al que casi siempre íbamos a comprar).
Como os digo, cerca del Arizona Mills Mall había uno, justo en Baseline (donde el asesino…), así que allá nos fuimos. En realidad, el centro comercial este no era nada excepcional... Imaginaos cualquier Media Markt de cualquier polígono industrial de aquí, y ya lo tenéis.
Pablo iba buscando un dispositivo USB de Wi-Fi para poder conectarse con el ladrillo de portátil que le había dado en la universidad, y encontró uno, no excesivamente barato... Luego estuvimos curioseando los portátiles: algunos de ellos tenía muy buen precio y muy buena pinta... Aún así, con la de gastos que teníamos, no nos decidimos a comprar ninguno... ¡De momento el Piripitoto nos ha aguantado!
Lo que también descubrí fue la maravillosa sección de aventuras gráficas (¿veis, capullos españoles de las tiendas de videojuegos? Las aventuras gráficas siguen vivas, aunque sea en los USA)… La verdad es que me dieron ganas de comprármelas todas… Pero bueno, al final, acabé cogiendo el Broken Sword 3, que aunque ya lo había jugado, no lo tenía original...
Luego me arrepentí, porque me di cuenta de que prefería tenerlo en versión doblada al español (difícil de renunciar al inconfundible doblaje de Tomás Rubio como George Stobbart)… Pero me di cuenta después de llegar a casa, aunque nos quedó pendiente volver otro día al Fry’s Elecronics.
Al salir de allí, ya se estaba poniendo el sol (tampoco os creáis que era tan tarde... Antes de las ocho), pero nosotros, que somos un par de valientes (hippies sin cañonero, que nos dirían por aquellos lares), nos decidimos a subir a casa en bici, ¡y eso que el asesino de Baseline andaba suelto! ¡¡¡Aunque también es cierto que pedaleamos bastante rapidito, sin hablar con nadie, y parando sólo en los semáforos en rojo!!!