sábado, 31 de marzo de 2007

Vuelta a la rutina

¡Hola a todos después de tanto tiempo! Siento haber tardado tanto en dar señales de vida, pero aún sigo empantanada en una macro-traducción (ya sé yo que algunos de vosotros sabéis lo que es eso, ¿verdad?), Así que de momento no os daré mucho la paliza... ¡Sólo pretendo que no os olvidéis de mí!

Pues la verdad es que ahora sí que sí, mi narración (que ya sé que os ha costado seguir hasta aquí) si siguiera en el mismo plan, os aburriría hasta extremos insospechados, porque las rutinas, son lo que tienen; que son aburridas por definición...

Además, como ya os he comentado muchas veces, en Tempe lo que nos ocurría era que las acciones más nimias, que aquí en Madrid nos cuestan 15 minutos de nuestro tiempo (como hacer la compra, o desplazarse a cualquier sitio andando o metro), allí eran una cuestión de horas, o incluso días.

Después de la otitis, Pablo por fin retomó la rutina universitaria, así que se levantaba y se iba al laboratorio. Yo, mientras tanto, me quedaba en casa, a tratar de lidiar con la terrible conexión wifi del hotel, y a la hora de comer, cogía mis bártulos y me iba con él a comer o me quedaba a comer allí directamente.

Y en eso se nos fueron muchos, pero que muchos días... Así que tendré que empezar a contaros detallitos (recetas de las cosas que cociné, o los juegos de ordenador a los que jugamos y las series que veíamos en la tele...), porque si no, estoy puede tener muy poca gracia (¡ah! ¡bueno! También puedo contaros lo de la orgía en la piscina o lo de la fiesta de universitarios macarras... Pero eso será más adelante...)

(Y aprovechando este post, os coloco una curiosa foto que he conseguido gracias al Google Earth de nuestro "hogar" arizónico: es una vista desde arriba del Homestead y su piscina en el centro de la U que hacía el hotel. Nuestra habitación, pa que os hagáis a la idea, estaba en el lado derecho, justo en la mitad de la pata de la U, donde se ven unos pequeños bultitos en el tejado, y las ventanas daban hacia la piscina... Bueno, eso ya lo sabéis...).

5 comentarios:

Dabidovich! dijo...

Jajaja, así que la piscina daba para mucho. Para disimular diré que también estoy interesado en las recetas de cocina y es que después del curradísmo post del Chute sobre la Pizza Franini se me ha despertado la vena cocinilla :-)

Borboleta dijo...

Hola Julia, aquí Mónica, la amiga de Berta, de nuevo visitando tu blog, me he hecho aficionada a tus historias arizónicas, lo que pasa que se me ha estropeado el ordenador y ahora es más dificil seguirte.
El otro dia conocí a una chica de arizona, que era una india navaja, muy maja..jaja
Debería seguir tu ejemplo y hablar de mi viaje a Australia así como tu estás haciendo.
Por cierto, yo intenté guardar imágenes del google maps y no pude..¿se hace de alguna manera secreta?
saludos desde la isla
Mónica

juliacgs dijo...

Hola Mónica,

¡Me alegra mucho que te hayas enganchado! Se que no es fácil seguirme, muchos se disculpan por no leérselo absolutamente todo, pero a mí me basta con que paséis por aquí de vez en cuando... ¡Sobre todo si me dejáis algún comentario que otro!

Seguro que la chica que conociste (la india navaja) es bien curiosa... Más adelante contaré nuestra visita relámpago por tierras de los Navajos...

Sobre lo de Google Maps, supongo que puedes darle al enlace de "imprimir" y así lo puedes guardar en pdf... Yo la foto la he sacado del Google Earth, que hay que descargárselo, pero ¡merece la pena! Por ejemplo, te hace como viajes a toda velocidad a traves del mapa en 3D, que eso el Google Maps no lo tiene... Y la gente cuelga sus fotos con enlaces a una página parecida a Flickr... Es bastante gracioso (Seguro que Pablo os puede contar más cosas, que fue él quien se lo descargó).

Pos lo dicho, Mónica... ¡Anímate a contarnos tu viaje a Australia!

Un beso a todos,

Julia

Franwerst dijo...

Yo coincido con Dabidovich en lo de las recetas... ¡viva el intercambio culinario! (ojo, no le déis la vuelta a la frasecita)

Por cierto Juli... muy bueno lo de prometer el post sobre "la orgía de la piscina" jejeje... ¿se trata de una anécdota real o es una burda estrategia comercial para crear expectación???? ;)

Besos.

juliacgs dijo...

Pues sí, resulta que lo de la orgía en la piscina es una anécdota real. Seguro que cuando la cuente, Pablo y César -y todos los demás- despotricáis, porque no se me ocurrió que pudiera interesaros tener pruebas visuales... ¡Y ni siquiera desperté a Pablo para que viera lo que yo estaba viendo! (eso no me lo perdonará en la vida)... Pero no, no es un mero reclamo publicitario... Aunque me he decidido a incluirlo porque César también me echó la bronca cuando se lo conté, porque yo ni siquiera lo consideré lo suficientemente interesante, o sea, que tampoco es la repanocha, a ver...